miércoles, 16 de septiembre de 2009

Huellas Dactilares I: Nuestra Señal de Identidad

Hasta hace poco se decía que no hay dos huellas dactilares idénticas, pero esta regla dejó de ser cierta cuando hace dos años nacieron los trillizos Hans, Jean y Armin. Estos trillizos revolucionaron la opinión pública y a la comunidad científica al ser uno de los casos más sorprendentes en materia genética. A este caso le siguieron otros muchos, el último en España, cuando nacieron Juan Antonio, Mario y Javier. Sin embargo, estos dos casos son excepcionales, ya que se dan uno cada 16 millones de embarazos. Por la rareza de estos casos, las pruebas de las huellas dactilares siguen siendo efectivas y aceptadas en los juicios.


Aquí os dejo un vídeo de unos bebes idénticos

Hace más de un siglo que se utilizaron por primera vez la identificación de las huellas dactilares para resolver un crimen. En concreto en 1902 se utilizaron como prueba en un juicio en Reino Unido. El acusado era Henry Jackson que había entrado en una casa a robar una caja de bolas de billar. Pero la "mala suerte" hizo que dejara sus huellas en la ventana por la que entró y salió, según relata Usborne en su libro Ciencia Forense. El caso de Henry Jackson fue el inicio de un método que ha ayudado a muchos criminólogos a identificar al criminal.

Es tan importante la identificación de las huellas dactilares que en la actualidad hay una ciencia dedicada a ello llamada Dactiloscopia. Esta ciencia es la encargada de estudiar los dibujos que tenemos en las yemas de los dedos para poder identificar a las personas. Esos dibujos son únicos, salvo en los casos mencionados anteriormente, y forman surcos en los dedos. Estos surcos en, ocasiones, se dividen y en otras se cortan formando lo que parece a simple vista un laberinto.

Los especialistas en huellas dactilares tienen la misión de encontrarlas, ya sea en el lugar del crimen, como en una prenda u otro objeto que no se encontrara en ese lugar. Una vez que tienen las huellas deben proceder a analizarlas. Más tarde las comparan con las huellas de los posibles sospechosos. Si los especialistas encuentran por lo menos seis puntos en común entre dos huellas, esto quiere decir que ambas pertenecen al mismo dedo.

Si te ha gustado este post no te pierdas el siguiente la próxima semana en el que hablaremos de cómo tocar sin dejar huella. ¿Qué hacen los delincuentes para no dejar sus huellas en el lugar del crimen?

Miriam Cánovas

3 comentarios:

  1. ¡Hola!, me alegro mucho de que vuelvas a tener un blog y que leas el mío que creé hace poco.

    La verdad que lo de las huellas dactilares es un tema bastante interesante de cara a la criminología. No sabía que habían gemelos o trillizos que podían tener las mismas huellas, menos mal que es un caso muy extraño.

    Además de en el crimen se utilizan mucho en los edificios de oficinas en los cuáles tienen un sistema que introduces el dedo y se abre la puerta. El único que he probado hasta ahora funciona fatal. A ver si algún compañero de profesión se encarga de mejorarlo :-)

    Un Saludo.

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  2. ¡Hola! Sí, atrás quedó el otro blog para empezar con "La otra crónica" jeje. Creo que todos necesitamos un cambio :-)

    Sí ahora se ha puesto de moda utilizar las huellas dactilares como método de seguridad. Pero como tú señalas todavía no funcionan del todo bien. Espero que dentro de unos años se perfeccionen.

    Un beso

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  3. EI, buenas.
    No se como llegarías a mi blog (misterio con el que deberé aprender a vivir) pero no importa, me gustó eso de ver comments de gente "desconocida" bueno, me agrego tu blog a mi lista de blogs y así me pasaré de vez en cuando. Ciao*

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